Después de completar el proceso de cristalizado del suelo, es esencial realizar cuidados periódicos, ya sea semanal o quincenalmente, con el objetivo de mantenerlo en óptimas condiciones en todo momento.
Se recomienda emplear una mopa para barrer el suelo y aplicar un spray atrapapolvo una o dos veces por semana.
Con este sencillo procedimiento, logrará conservar su suelo en un estado impecable durante el mayor tiempo posible.
El mármol figura entre los materiales más elegidos por su capacidad para conferir un toque distintivo a cualquier espacio.
Dado que es poroso y tiende a absorber manchas rápidamente, se aconseja tratarlas de inmediato. Para ello, se puede emplear un trapo impregnado en agua y jabón.
Es necesario eliminar el polvo de los suelos de mármol casi a diario, además de limpiar la superficie con un paño y detergente.
En algunos casos, se aplica una capa de cera para prevenir la absorción de líquidos, aunque esta cera puede otorgar un tono amarillento a la roca.
Restaure el color blanco natural limpiando la zona amarillenta con una esponja impregnada de jabón o utilizando un cepillo con agua y vinagre, aunque se recomienda no abusar de esta mezcla.
Siempre es aconsejable recurrir a trucos de limpieza para eliminar manchas aparentemente difíciles de desaparecer.
Para las manchas de vino, especialmente tinto, mezcle dos o tres cucharadas de borax en un vaso de agua y aplique la mezcla en la superficie afectada.
El borax es un cristal suave y fácilmente soluble en agua.
También puede utilizar esta solución para las manchas de café. Sin embargo, las quemaduras de cigarrillos solo desaparecerán mediante el pulido de la superficie.
Aunque el brillo del suelo parezca desvanecerse, existen consejos para recuperarlo, proporcionando a toda la vivienda una apariencia limpia y atractiva.
Por lo general, basta con fregar el suelo con poca agua y su detergente habitual, tantas veces como sea necesario para eliminar la suciedad y las manchas.
Si desea añadir un toque extra de brillo, puede desechar el agua usada y llenar el cubo con agua limpia y suavizante.
Esto hará que el suelo luzca más brillante una vez seco, con un agradable aroma.
En cualquier caso, siempre puedes optar por contratar a un profesional de la limpieza o a una empresa en Marbella de pulidos y abrillandados de suelos de mármol.