El terrazo, un material atemporal y versátil, ha sido utilizado en la construcción y diseño de interiores durante décadas. Compuesto por fragmentos de mármol, vidrio, o piedra, unidos por un aglutinante de cemento o resina, el terrazo ofrece una estética única y duradera para suelos.
En este artículo, exploraremos algunos de los tipos más comunes de suelos de terrazo y proporcionaremos guías de limpieza para mantener su esplendor a lo largo del tiempo.
El terrazo tradicional es el clásico y más conocido. Este tipo de suelo incorpora fragmentos de mármol, granito, vidrio y otros materiales, creando una superficie vibrante y rica en texturas. La clave para mantener la belleza de este terrazo es la limpieza regular.
Se recomienda barrer o aspirar el suelo diariamente para evitar la acumulación de polvo y suciedad. La limpieza húmeda con un detergente suave y agua tibia también es esencial para preservar el brillo natural.
Este tipo de terrazo se destaca por la inclusión prominente de fragmentos de vidrio en su composición. La limpieza de terrazo con agregados de vidrio debe realizarse con cuidado para evitar arañazos en la superficie.
Se aconseja utilizar trapeadores suaves y productos de limpieza específicos para terrazo, evitando aquellos que contengan partículas abrasivas.
Los suelos de terrazo que incorporan incrustaciones metálicas ofrecen un aspecto moderno y elegante. Estos fragmentos metálicos pueden variar desde aluminio hasta cobre, agregando un toque único a la superficie.
La limpieza de este tipo de terrazo debe realizarse con productos neutros y no abrasivos para evitar dañar las incrustaciones metálicas. Se recomienda secar la superficie después de la limpieza para prevenir manchas.
El terrazo con patrones personalizados permite una creatividad ilimitada en el diseño de suelos.
Pueden incorporarse patrones geométricos, logotipos o imágenes específicas. La limpieza de este tipo de terrazo depende del diseño, pero en general, se deben seguir las pautas de limpieza estándar. Se recomienda evitar el uso de productos químicos agresivos que puedan dañar los detalles del diseño.
Elimine polvo y partículas sueltas utilizando un trapeador suave o una aspiradora con accesorios adecuados para suelos duros.
Utilice un trapeador de microfibra con agua tibia y un detergente suave específico para terrazo.
Evite el uso de productos ácidos o abrasivos que puedan dañar la superficie.
Seque la superficie con un paño limpio y seco para prevenir manchas y mantener el brillo original.
No utilice productos de limpieza que contengan ácidos fuertes, lejía o amoníaco, ya que pueden deteriorar el terrazo con el tiempo.
Utilice almohadillas o protectores en las patas de los muebles para prevenir rayones en la superficie del terrazo.
Manteniendo estos pasos simples pero efectivos, podrá preservar la belleza y durabilidad de su suelo de terrazo independientemente del tipo que elija para su hogar o espacio comercial. Recuerde que la limpieza regular es clave para asegurar que su inversión en suelos de terrazo perdure a lo largo de los años, manteniendo su elegancia y sofisticación.
Contaca ahora con una empresa en Marbella de pulidos y abrillandados de suelos de terrazo.